A la Mesa de la Esperanza, también acuden los habitantes de calle

Bogotá D.C., marzo 03 de 2014. En Antonio Nariño, no solo a nivel interinstitucional se participa de la Mesa la Esperanza, ahora los habitantes de calle, también ocupan un espacio en las deliberaciones que allí se realizan. Todos los miércoles la cita es a las 9: 00 a.m. y allí siempre asiste al menos un representante de este sector de la población.

¿Pero qué buscaba en esta mesa con su participación?. Para el referente de Adultez Vladimir Gómez, un trajinado servidor público, que lleva más de cincuenta años trabajando en el sector social, ésta mesa nace para fortalecer ciudadanía del habitante de calle . Pero además los hijos de esta población también se encuentran en un Consejo de niños y niñas, donde la recreación y la atención, es lo fundamental.

Esta fue una tarea que empezó con el apoyo de los gestores de adultez, con el fin de convencer a las personas que habitan las calles de la localidad de Antonio Nariño. Allí muy puntual todos los miércoles a las 7:00 a.m, estas personas reciben una visita amable de sus referentes de la Secretaría de Integración, que llegan y los buscan particularmente debajo de los puentes para "recordarles que tienen una cita con la Mesa la Esperanza, señala Gómez.

"Nosotros les hablamos y los invitamos a los servicios, los orientamos por ejemplo en temas como familia, territorio, saludo y se invitan a los talleres de sistemas”. Señala Vladimir Gómez.

Este referente que se dedica de lleno al tema de adultez, señala que el trabajo, le ha permitido salvar la vida de varios de ellos, porque han tenido la posibilidad de recibir atención médica.

Además, al interior de esta población y gracias a este proceso en la Mesa la Esperanza, se ha logrado descubrir líderes y lideresas de calle, que han logrado proponer y aportar avances importantes para la comunidad. Allí por ejemplo se ha plantado un trabajo digno para los recicladores, e incluir este tema en los Consejos de gobierno de las alcaldías de Antonio Nariño y Puente Aranda.

Esta gestión también ha sido importante, porque además, se ha logrado la cedulación de varias de estas personas, incluso cuentan con la asesoría de un abogado.

Actualmente esta población recibe capacitación en sistemas, pero también les enseñan a descubrir ciertas enfermedades como la tuberculosis, incluso en sus cambuches o sitios de alojamiento, no es raro encontrar un diploma que certifique haber cursado un curso de salud, manejo de aguas, o en sistemas. En diciembre pasado la Alcaldía de Antonio Nariño compartió una cena y Aguas Bogotá también los capacitó, otros han acudido a la biblioteca local para recibir apoyo en alfabetización.

Pero los más importante en este proceso es que los resultados no son nulos. La Subdirección local y las alcaldías, han logrado que esta población se capacite en varias disciplinas.

Rafael Pérez, es un líder de la Mesa, señala que las capacitaciones y actividades con los hijos, arrojan avances importantes. "como reciclador hemos tenidos logros importantes, ya sé cómo manejar un computador, escribir una carta, conocer temas de políticas públicas o acudir a un comedor comunitario es importante”.