Este proceso de formación, que tuvo una inversión cercana a los $163 millones de pesos, busca fortalecer la adquisición de habilidades y competencias de estas personas para lograr su posterior inserción en el mercado laboral, así como, desarrollar sus capacidades productivas.

Como resultado de este ejercicio productivo, se ha logrado no solo que las personas privadas de la libertad se capaciten en artes y oficios y mejoren así su calidad de vida, sino que además, puede contribuir a reducir su pena.

Dichos procesos de capacitación se han desarrollado en el marco de los convenios de la Secretaría de Integración Social con el SENA y CENASEL, los cuales proveen Instructores y materiales para la realización de los cursos. Los Convenios también ofrecen talleres de formación en desarrollo personal, empleabilidad y emprendimiento empresarial, con el propósito de cualificar los procesos de formación dirigidos a la población adulta.

Esta iniciativa se desarrolla a través del Proyecto Adultez con oportunidades que desarrolla en la ciudad la SDIS y que atiende a la población constituida por las personas vinculadas a la prostitución, los ciudadanos habitantes de calle y las personas adultas en condición de fragilidad social. A 31 de julio se han formado 1338 Personas del Proyecto "Adultez con Oportunidades”.