La ciudad garantiza la alimentación de cerca de 1 millón de personas en situación de pobreza y vulnerabilidad, fortaleciendo las respuestas integrales desde los 20 comités locales de seguridad alimentaria.

Es inconcebible que un niño o niña muera por desnutrición en Bogotá, como lamentablemente sucedió en Suba, con una niña de 2 años. En el 2009 hubo 10 casos de mortalidad en niños y niñas menores de cinco años. En 2010 fueron 2.

Existen diferentes escenarios de atención como jardines infantiles, comedores comunitarios, comedores escolares, centros amar y centros crecer. En la localidad de Suba, donde murió la niña, se destaca la atención en 20 comedores comunitarios. Donde el 80% de la población atendida son niños y niñas.

En Suba se entregaron 813 canastas complementarias de alimentos distribuidas en las siguientes modalidades: 239 canastas de discapacidad, 190 canastas para población indígena, 81 canastas rurales y 303 canastas SCHS, las cuales complementan los requerimientos de calorías, proteínas, vitamina A, calcio y hierro requerida por dichas familias.

La Política Pública de Seguridad Alimentaria y Nutricional realiza el suministro de alimentos en los jardines infantiles. A 2010, en la localidad de Suba fueron atendidos 5121 niños y niñas. Con respecto a los bonos canjeables por alimentos, que tienen el propósito de apoyar económicamente y de manera complementaria la adquisición autónoma y responsable de alimentos, para el caso puntual de mujeres en estado de gestación y lactantes, se entregaron a diciembre de 2010, 649 bonos canjeables. También se entregaron 3.825 bonos de apoyo alimentario fin de año a niños-as menores de 5 años que participan en las diferentes modalidades de atención a primera infancia para sostener su situación nutricional durante el periodo de vacaciones.

Estos logros motivan la responsabilidad de todos y todas en la Ciudad de Derechos, que trabaja porque nadie padezca hambre en Bogotá; menos, los niños y las niñas.